Las entidades bancarias rechazan a menudo solicitudes de préstamo por razones totalmente incomprensibles, aunque cumplas los requisitos que describen para un prestatario. A veces te aprueban, pero las condiciones son menos favorables e inadecuadas: un tipo de interés más alto o un importe menor del que querías. Para aumentar tus posibilidades de obtener una oferta favorable, ten en cuenta los siguientes puntos.
Buen historial crediticio y elevada calificación crediticia
Las entidades bancarias evalúan sus propios riesgos, por lo que analizan cuidadosamente la información sobre un prestatario potencial. Para ellos es importante que el dinero se devuelva, y a tiempo. Por eso es necesario que tu historial crediticio esté libre de deudas y atrasos. Se evalúan todos los préstamos y micropréstamos reembolsados anteriormente y los actuales. Sería deseable que cuando solicites un nuevo préstamo, tengas menos deudas pendientes. Por lo tanto, para aumentar sus posibilidades de obtener un préstamo favorable, pague puntualmente las deudas existentes y evite los retrasos en los pagos.
En esta fase, es mejor no presentar muchas solicitudes seguidas a todas las entidades de crédito, ya que los rechazos múltiples pueden arruinar su historial crediticio. No se preocupe, aún puede corregirse, pero tendrá que ser paciente y dedicar mucho tiempo. Sólo hay una manera. Tienes que pagar puntualmente las deudas existentes, cerrar los préstamos sin demora y luego solicitar otros nuevos. Al cabo de cierto tiempo, los bancos verán que eres solvente y responsable. Si se aplica este esquema a los préstamos, su historial crediticio puede mejorar un poco más rápido porque los préstamos se conceden a corto plazo.
Si no tiene historial crediticio porque nunca ha solicitado dinero a bancos o entidades financieras, esto también es una desventaja para ellos, ya que sencillamente no tendrán forma de evaluar su capacidad de pago y honradez.
La calificación crediticia se representa numéricamente y se compone de las puntuaciones de todos los contactos anteriores con entidades crediticias, los productos aceptados y el comportamiento de reembolso. Cuanto más alta sea la calificación crediticia, mejor, pero no es el único criterio determinante. También son importantes la edad, el lugar de trabajo y el estado civil del prestatario, el plazo del préstamo y la finalidad para la que se adquiere, entre otras cosas.
Facilite toda la información posible
Cuanta más información facilites sobre ti y tu solvencia, mejor. Puedes presentar no sólo un certificado de ingresos de la organización para la que trabajas, sino también otros documentos que confirmen ingresos adicionales (por ejemplo, del alquiler de bienes inmuebles o del registro como empresario individual).
A menudo, las condiciones de crédito más favorables se ofrecen con la pignoración de bienes muebles o inmuebles, así como cuando se realiza un pago inicial o se atrae a un coprestatario. Esto aumenta las posibilidades de aprobación de la solicitud.
¿Qué hacer si le deniegan un préstamo?
Es aconsejable intentar comprender la situación y averiguar en el banco por qué se lo han denegado. En algunos casos, no se facilita esta información, por lo que puede intentar evaluar por su cuenta qué criterios influyeron negativamente en la decisión del banco. Si no es posible corregir estos factores, puede solicitarlo a otra entidad de crédito con requisitos más flexibles.