Los amigos y parientes suelen prestarse dinero unos a otros. Pero una persona no siempre dispone de la cantidad que le pide un buen conocido. En este caso, su conocido puede pedir un préstamo a un banco o a una IMF. ¿Qué hacer en una situación así y qué problemas pueden surgir para el prestatario?

Consecuencias de suscribir un préstamo a su nombre para otra persona

El principal peligro es que el solicitante se niegue a cumplir sus obligaciones financieras. En este caso, toda la responsabilidad del reembolso del préstamo recae sobre el prestatario oficial. Si no hay pruebas, tendrá que cumplir todas las obligaciones.

Será el prestatario oficial quien se enfrente a los problemas que surjan si no se paga el préstamo. Los bancos pueden iniciar procedimientos judiciales para recuperar la deuda. Esto afectará negativamente al historial crediticio del prestatario. Le resultará difícil conseguir préstamos más adelante si necesita el dinero para sus propias necesidades.

Los errores más comunes de los prestatarios que piden préstamos para otras personas

Los problemas suelen deberse a errores cometidos por los prestatarios. ¿Cuáles son los más frecuentes?

• El prestatario no redacta un contrato de préstamo. Este documento especifica todas las condiciones del trato, incluidas las condiciones de devolución y el importe total del préstamo. Es importante señalar en el contrato y la responsabilidad si no se devuelven los fondos. Si la cantidad es grande, es mejor redactar un contrato de acuerdo con todos los requisitos – ante notario.
•  El prestatario no toma un recibo de la deuda. Este documento debe especificar quién tomó el dinero, de quién y en qué cantidad, bajo qué contrato y en qué plazo debe devolver. Otras condiciones, en su caso, también se prescriben.
• El prestatario sólo dispone de un documento: un recibo o un contrato. Ambos son importantes a efectos de seguridad y para resolver litigios. El primero es necesario como prueba de la transferencia de dinero. El contrato se utiliza como prueba de las obligaciones de la deuda. Se celebra después de la transferencia de dinero. Es mejor firmar ambos documentos al mismo tiempo.
• El prestatario borra la correspondencia y los mensajes en los que un amigo o familiar le pide un préstamo. No es la prueba más convincente y puede que no se acepte ante un tribunal. Sin embargo, en algunos casos, prestan atención al historial de mensajes, por lo que es mejor no borrar nada hasta que se devuelva el dinero.
• El prestatario no pregunta por qué su amigo o pariente no puede solicitar él mismo un préstamo. La respuesta a esta pregunta es importante, puede aclarar la situación. Hay razones como la falta de una fuente de ingresos oficial o permanente, un mal historial crediticio, una fuerte carga de deudas. Asumir la responsabilidad de una persona así es un gran riesgo.

No es posible comprobar el historial crediticio de otros prestatarios, ya que esta información es confidencial. Sólo es posible enviar una solicitud a la oficina pertinente con el consentimiento por escrito de la persona. Si no tiene nada que ocultar, dará el poder necesario. Si no, es mejor denegar el préstamo para evitar problemas.

Lo principal es recordar que, si se trata de asuntos financieros, todas las obligaciones deben formalizarse por escrito. Aunque el préstamo lo pida una persona cercana: hay que pensárselo bien para evitar problemas. Además, no debes aceptar un trato así si tú mismo tienes poca capacidad financiera. Es necesario controlar los reembolsos de tu amigo para evitar retrasos en los pagos y sanciones.